El reto

Fiyi cuenta con una infraestructura de transporte bastante desarrollada y un sistema de puentes y autopistas relativamente moderno en las islas principales. No obstante, más de la mitad de la población del país vive en comunidades rurales y, aunque la red principal de carreteras está bastante desarrollada, estas comunidades se encuentran aisladas geográficamente y sus carreteras son muy susceptibles al clima tropical. Las lluvias torrenciales y las inundaciones, así como los desastres naturales, provocan daños a las infraestructuras, interrupciones en la red de transporte y dificultan el acceso en las comunidades rurales.

El gobierno de Fiyi es consciente de que la red de transporte es crucial para el desarrollo económico, por lo que está comprometido con mejorar la infraestructura de carreteras en todo el país, con el fin de que las comunidades estén mejor comunicadas y más unidas. La Autoridad de Transporte Terrestre de Fiyi (FRA), que se encarga de la planificación, el desarrollo y el mantenimiento de la infraestructura de carreteras del país, tiene previsto reparar 100 de los puentes más importantes del país en los próximos años. El puente antiguo de Nakabuta, situado en una frondosa región tropical del país, fue uno de los puentes incluidos en la lista.

La solución

La Autoridad de Transporte Terrestre de Fiyi decidió que el puente de Nakabuta debía ser reemplazado y buscaba una solución sostenible, permanente e innovadora. El nuevo puente tenía que ser rápido de instalar y rentable en comparación con el hormigón. Finalmente se decantó por el puente Compact 200™, que suponía la mejor solución para el proyecto. Los contratistas Fletcher Construction pudieron instalar el nuevo puente de 29 metros, de principio a fin, en tan solo 3 meses. En el proyecto participaron obreros de la zona, que ayudaron a construir e instalar el nuevo puente.

El resultado

El nuevo puente de Nakabuta ha mejorado las vidas de los habitantes de la zona al facilitar el acceso a servicios sanitarios y escuelas. Además, los agricultores locales pueden acceder a mercados situados a mayor distancia, lo que sienta las bases del desarrollo regional y ayuda a impulsar la economía de la región.

El primer ministro Voreqe Bainimarama encargó la construcción del puente en septiembre de 2017. Durante su visita a la zona, aseguró que el nuevo puente promovería el crecimiento económico y proporcionaría acceso a servicios vitales. En la ceremonia de inauguración, Voreqe Bainimarama declaró: «La Autoridad de Transporte Terrestre de Fiyi tiene que reemplazar más de 100 puentes críticos y no dispone de mucho tiempo dado el estado en el que se encuentran algunos de ellos. Por ello, ha comenzado a utilizar puentes modernos Bailey como este, que se pueden instalar en relativamente poco tiempo y cuestan mucho menos que los puentes fijos. La construcción de este puente nos ha costado 1,6 millones de dólares, cifra muy inferior a lo que habríamos pagado por un puente de hormigón. Además, se completó en tan solo tres meses».